Sin City

Título:Sin City


Director: Robert Rodriguez / Frank Miller / Quentin Tarantino (Invitado)


Año: 2005


País: USA


Duración: 124

En Sin City se reúnen todo tipo de personajes. Desde políticos y miembros de la iglesia corruptos hasta policías violentos que solo buscan llevar el caso hasta el final y hacer justicia a su manera, pasando por prostitutas que tienen su propia zona en la cual son las dueñas absolutas que imparten las normas y tipos muy, pero que muy duros capaces de hacer lo que sea por vengar a su primer ligue de una noche.

Que la adaptación de Sin City ha sido uno de los mejores impulsos que ha tenido el mundo del cómic para su aceptación social como algo serio, artístico y narrativo, no es una afirmación demasiado arriesgada ni inteligente a día de hoy. Pero no por ello es menos cierta. Y, para esto, no solo hay que ver las ventas que ha tenido el cómic desde el estreno de la misma, sino el éxito de otros cómics en principio adscritos a un circuito no tan comercial como sería el de Marvel tras sus adaptaciones al cine, como serían otras adaptaciones de Frank Miller (300 y su adaptación), como de Alan Moore (V de Vendetta y su adaptación, Watchmen y su adaptación).

Y esto es gracias principalmente a la gran calidad del film dirigido a medias entre el sr. Rodríguez y el propio sr. Miller, especialmente a nivel técnico. Porque a nadie se le escapa que las adaptaciones de cómics surgen ya desde los años 40, cuando el formato alcanza algo similar a la adultez. Y si no, ahí están los seriales de Batman, Flash Gordon o Superman, todavía hechos para cine. Posteriormente, irían apareciendo más y más adaptaciones de distintas calidades, yendo desde los grandes nombres de Marvel y DC como Spiderman, los ya citados Batman y http://akas.imdb.com/title/tt0078346/, X-Men o Daredevil, al cómic europeo como Astérix y Obélix, Lucky Luke, Fantômas o Mortadelo Y Filemón o también obras más underground como serían las de Ralf König, con El Condón Asesino como ejemplo más tópico, y por supuesto los mangas, con claros ejemplos como Ichi The Killer o Lady Snowblood pululando por ahí.

Como digo, la calidad del presente film es más que notable, ya desde la cuestión del guión, que se establece en torno a 3 historias presentadas tras una breve introducción de la que cierra la cinta, muy similar en este sentido a Pulp Fiction, contando también con unos cuantos guiños entre ellas, que ayudan en la ambientación en un marco espacio-temporal común. Esto es también una parte fundamental de la adaptación fiel al cómic, puesto que copia la organización que tiene en cuanto a la presentación de historias breves ambientadas en la ciudad del pecado, interrelacionadas mediante intervenciones de personajes de una historia en otras.

Con ello, el ritmo no decae casi en ningún momento (el traslado de Jackie Boy al pozo de brea podría ser un ejemplo de las secuencias de peor ritmo, aún a pesar de ser la dirigida a modo de invitado por el sr. Tarantino), y no se permite al espectador aburrirse en absoluto, siempre y cuando esté dispuesto a unas cuantas dosis de violencia justiciera protagonizada por antihéroes prototípicos y contra personajes realmente sucios y pervertidos. Y ni siquiera supone un problema la presentación de cada una de ellas, puesto que directamente se introducen en un conflicto desde el cual conoceremos a los personajes y se desarrollará cada fragmento.

Además, la narración en off constante nos ayuda en la ambientación cercana al cómic que se presenta, y al mismo tiempo ayuda en la facilidad de comprensión para el espectador al respecto de cómo está transcurriendo la historia, y lo más importante: lo sitúa en la historia y le ayuda a entender el por qué de la misma.

Pero es en la parte técnica donde la cinta realmente supuso una revolución, cogiendo el estilo de sombras y luces con mucho contraste, y la utilización de blanco y negro con algún color puntual que el sr. Miller hace en el cómic, y empleando esta misma idea para la presentación del film. La colocación de la cámara también recoge directamente el testigo de la situación del ojo narrativo del cómic, con planos directamente sacados del mismo como sería el cenital de Hartigan en la cárcel, por citar un ejemplo. Además, el uso de chromas para insertar fondos sobre los que destacar enormemente a los personajes, apoya el sentimiento de estar viendo un cómic al que se pretende llegar, con mucho éxito, y evitando con ello cualquier tipo de posible visión naturalista de la cinta.

El montaje, por su parte, se vuelve totalmente natural y sencillo, sin grandes aspavientos, y muy pocos errores (algún que otro raccord de movimiento y algún momento como el golpe al perro lobo que no me acaban de convencer), pero sin embargo con un duro trabajo en postproducción por lo que citaba arriba de los chromas y efectos de color más complejos, así como momentos en los que directamente estamos viendo solamente siluetas, un tipo de viñetas muy común en el cómic. La banda sonora se adapta muy bien a toda esta personalidad del film y, sin destacar, ayuda en la ambientación del mismo a la perfección, siendo el sonido, como suele ocurrir en este tipo de alteraciones de la concepción natural de una historia, lo más cercano a la realidad y menos exagerado, ayudando en ocasiones a ocultar la violencia y obligando al espectador a imaginarla (aunque lo normal es la muestra de la misma).

Los actores también buscan ese punto de realidad exagerada, forzando a los personajes hasta el límite, siendo creíbles siempre dentro de ella. Destaca en este sentido la dureza de los antihéroes, con un Bruce Willis en un buen nivel, especialmente en el final de su historia, un Mickey Rourke que en ocasiones falla, especialmente al principio, pero que muestra una gran coherencia entre su narración y sus acciones, consiguiendo en realidad ser el más profundo de todos los personajes del film, y un Clive Owen al que se le podría criticar su exceso de frialdad y sobradez, pero que consigue ser creíble.

Entre el resto del reparto, destacar a Benicio del Toro, que llega al punto de suciedad adecuado para conseguir ser odiado, pero con alguna falta respecto a la borrachera que se supone que lleva encima, y un Nick Stahl realmente asqueroso, ayudado, eso sí, por todos los efectos para darle el aspecto del bastardo amarillo en que se convierte. Y no olvidemos a Jessica Alba, que hace su papel de chica sexy pero no le da el aspecto inteligente que debería, teniendo en cuenta que se supone que lo es. Los demás pues en la misma línea de dureza y frialdad necesaria para sobrevivir en una ciudad como Sin City.

En resumen, una adaptación muy fiel a la obra original, sin olvidar lo que supone el paso a cine y la transformación del ritmo narrativo, que destaca no solo por esa adaptación sobre el papel, sino, sobre todo, por su búsqueda de un aspecto lo más cercano posible al cómic, siendo realmente novedosa en este sentido.

PUNTUACION

Originalidad/Riesgo: 9.0
Técnica: 9.5
Guión: 8.0
Actuación: 8.0

TOTAL: 8.5