Título: Intrépidos Punks
Director: Francisco Guerrero
Año: 1986
País: México
Duración: 89
Un grupo de punks liderados por una violenta mujer llamada Fiera está intentando reunir fondos para poder drogarse y montar fiesta. De paso, quieren montar un secuestro para poder sacar de la cárcel a Tarzán, jefe de la banda (y hombre de Fiera, por supuesto), y a otros miembros también encarcelados. Por otro lado, dos detectives resuelven juntos varios casos, y les acaba cayendo el caso de los Punks, que curiosamente ya habían encarcelado ellos mismos.
Bueno, como todos sabemos, los punks son esos señores (y digo señores porque están entrados en años ya) que llevan peinados de colores cortados por los lados de una manera extravagante, se visten de cuero con cadenas, se pintan motivos nazis y telarañas por el cuerpo, siempre viajan en moto y en grupo (aunque llevan un coche detrás para poder cargar algunas mujeres extra), viven en cuevas (las casas okupa no suelen ser mucho más (por desgracia para lo que significa el movimiento)), y dedican su vida a delinquir, a la fiesta y a fornicar.
Por desgracia, excepto detalles, esto se acerca bastante a la realidad, pero en este film podrán ver estas cosas y más como un modo de presentar a los punks al estilo que se presentaba a los hippies en films como I Drink Your Blood, de un modo tan maravillosamente exploitation y alarmador que se deberían emitir constantemente en los medios de comunicación más carcas y manipuladores, así como en ciertos colegios para evitar que sus niños sigan la senda equivocada (o que, al menos, aprendan a apreciar el cine bizarro). Quizás lo habrían logrado vender en estos círculos si no hubiera el exceso de carnes gratuitas que se muestran constantemente, pero bueno, seguro que esto estaba solo para representar la degradación de estos inmundos seres que son los punks.
Qué decirles acerca de los aspectos internos de un film de estas caracerísticas? Pues a ver, la falta de medios, sumada a un guión absolutamente ridículo, evidente y vacuo, es difícil que llegue a ningún punto decente. Y la presente no es una excepción. Para empezar, como suelo hacer, quiero comentar la narrativa totalmente ridícula, ya que en realidad todo el contenido de la historia podría resumirse en 15 minutos de metraje, o como mucho en 20, en lugar de rellenar con escenas de violación de leyes, libertinaje y fiesta una y otra vez, pudiendo haber hecho un poco más de trabajo para que nos encariñáramos mínimamente con alguno de los personajes en lugar de eso.
No obstante, debo recordar ciertos planos bastante (o muy) interesantes, como un cráneo que revienta al recibir un impacto de bala, largando de un modo maravilloso un chorrazo de sangre contra el retrovisor de un coche, o el modo en que arde el dependiente de una gasolinera, que realmente tiene currado el aspecto de ser él ardiendo, no como suele suceder en este tipo de efectos. Una pena que, tal y como está el montaje, y la cantidad de metraje de relleno que hay para poder llegar a los 90 minutos, se estropeen esos buenos momentos que nos aporta la cinta. Pero no todos los efectos son tan maravillosos, ya que querría comentar ese coche que estalla mientras salta por el barranco (en cuanto deja de tocar tierra!).
Los personajes, pues eso, vacuos y sin definición, con unos actores que además de pasarse bastantes años de los que deberían tener para hacer esos papeles, no es que se luzcan precisamente, ni en los diálogos, ni mucho menos en los combates, aunque aquí también encontramos buenos momentos como el homenaje que Tarzán hace a Undertaker en forma de Tombstone a un rival. Para algo lleva esa bonita máscara, ese traje hortera y esos músculos gigantes.
Y no querría cerrar esto sin hablar de la gran canción que se usa como banda sonora constantemente, un gran himno sobre los Intrépidos Punks, con frases imposibles (Intrépidos Punks/(...)/Con sus trajes de piel/Color como la noche), y tratando del tema de la peli directamente, como solo está permitido a grandes films como El Ataque de los Tomates Asesinos, Supersonic Man, El Vengador Tóxico, Los Payasos Asesinos del Espacio Exterior, o La Matanza Caníbal de los Garrulos Lisérgicos.
Vamos, un film de los que se disfrutan en grupo, que además sirve como alarma social ante el peligro de estas juventudes desfasadas y violentas que cada vez circulan más por nuestras calles, atracando a las viejas, o a quien sea, para poder drogarse. Ya saben, si se los cruzan, cámbiense de acera, pues como dicen en la canción: Siempre rompen las reglas/No conocen el bien.
Bueno, como todos sabemos, los punks son esos señores (y digo señores porque están entrados en años ya) que llevan peinados de colores cortados por los lados de una manera extravagante, se visten de cuero con cadenas, se pintan motivos nazis y telarañas por el cuerpo, siempre viajan en moto y en grupo (aunque llevan un coche detrás para poder cargar algunas mujeres extra), viven en cuevas (las casas okupa no suelen ser mucho más (por desgracia para lo que significa el movimiento)), y dedican su vida a delinquir, a la fiesta y a fornicar.
Por desgracia, excepto detalles, esto se acerca bastante a la realidad, pero en este film podrán ver estas cosas y más como un modo de presentar a los punks al estilo que se presentaba a los hippies en films como I Drink Your Blood, de un modo tan maravillosamente exploitation y alarmador que se deberían emitir constantemente en los medios de comunicación más carcas y manipuladores, así como en ciertos colegios para evitar que sus niños sigan la senda equivocada (o que, al menos, aprendan a apreciar el cine bizarro). Quizás lo habrían logrado vender en estos círculos si no hubiera el exceso de carnes gratuitas que se muestran constantemente, pero bueno, seguro que esto estaba solo para representar la degradación de estos inmundos seres que son los punks.
Qué decirles acerca de los aspectos internos de un film de estas caracerísticas? Pues a ver, la falta de medios, sumada a un guión absolutamente ridículo, evidente y vacuo, es difícil que llegue a ningún punto decente. Y la presente no es una excepción. Para empezar, como suelo hacer, quiero comentar la narrativa totalmente ridícula, ya que en realidad todo el contenido de la historia podría resumirse en 15 minutos de metraje, o como mucho en 20, en lugar de rellenar con escenas de violación de leyes, libertinaje y fiesta una y otra vez, pudiendo haber hecho un poco más de trabajo para que nos encariñáramos mínimamente con alguno de los personajes en lugar de eso.
No obstante, debo recordar ciertos planos bastante (o muy) interesantes, como un cráneo que revienta al recibir un impacto de bala, largando de un modo maravilloso un chorrazo de sangre contra el retrovisor de un coche, o el modo en que arde el dependiente de una gasolinera, que realmente tiene currado el aspecto de ser él ardiendo, no como suele suceder en este tipo de efectos. Una pena que, tal y como está el montaje, y la cantidad de metraje de relleno que hay para poder llegar a los 90 minutos, se estropeen esos buenos momentos que nos aporta la cinta. Pero no todos los efectos son tan maravillosos, ya que querría comentar ese coche que estalla mientras salta por el barranco (en cuanto deja de tocar tierra!).
Los personajes, pues eso, vacuos y sin definición, con unos actores que además de pasarse bastantes años de los que deberían tener para hacer esos papeles, no es que se luzcan precisamente, ni en los diálogos, ni mucho menos en los combates, aunque aquí también encontramos buenos momentos como el homenaje que Tarzán hace a Undertaker en forma de Tombstone a un rival. Para algo lleva esa bonita máscara, ese traje hortera y esos músculos gigantes.
Y no querría cerrar esto sin hablar de la gran canción que se usa como banda sonora constantemente, un gran himno sobre los Intrépidos Punks, con frases imposibles (Intrépidos Punks/(...)/Con sus trajes de piel/Color como la noche), y tratando del tema de la peli directamente, como solo está permitido a grandes films como El Ataque de los Tomates Asesinos, Supersonic Man, El Vengador Tóxico, Los Payasos Asesinos del Espacio Exterior, o La Matanza Caníbal de los Garrulos Lisérgicos.
Vamos, un film de los que se disfrutan en grupo, que además sirve como alarma social ante el peligro de estas juventudes desfasadas y violentas que cada vez circulan más por nuestras calles, atracando a las viejas, o a quien sea, para poder drogarse. Ya saben, si se los cruzan, cámbiense de acera, pues como dicen en la canción: Siempre rompen las reglas/No conocen el bien.
PUNTUACION
Originalidad/Riesgo: 6.0
Técnica: 7.0
Guión: 5.5
Actuación: 8.0
TOTAL: 6.5
Originalidad/Riesgo: 6.0
Técnica: 7.0
Guión: 5.5
Actuación: 8.0
TOTAL: 6.5
No hay comentarios:
Publicar un comentario